Las tortugas de Cambutal (Panamá)

La tortuguita tozuda. Foto R.Puig.
Para mis nietos
Cuando la televisión en España sólo emitía en blanco y negro había un programa humorístico muy popular que se llamaba «La tortuga perezosa».
¡Qué injusticia! En realidad las tortugas, sobre todo las del mar, se ponen en marcha a los pocos días de nacer.
¡Ni cortas ni perezosas!

Tienen tres días y se preparan para el mar. Foto R.Puig
El 30 de diciembre fui testigo de ello en las playas de Cambutal gracias a Alexis Rodríguez, presidente de la asociación sin ánimo de lucro Tortuagro, «grupo para la conservación de las tortugas marinas, desarrollo del turismo y del sector agropecuario de Cambutal», quien nos invitó para asistir desde poco antes de la salida del sol a la suelta al mar de sesenta y cuatro tortugas que, tres días antes, habían eclosionado del cascarón en uno de los muchos viveros de la organización.

Alexis Rodríguez y sesenta y cuatro bebitas. Foto R.Puig
En las playas de Cambutal, entre agosto y setiembre, desovan varias clases de tortugas marinas: Verdes, Loras, Carey y Baulas. Como explica la asociación, estos quelonios se encuentran en peligro de extinción debido a la amenaza constante de «hueveros» (personas que roban los huevos) y comerciantes ilegales.
Durante la época de desove los diez voluntarios de Tortuagro recorren de noche las playas para recoger los huevos y ponerlos al seguro en los viveros donde se incuban y se salvan así de aves y cánidos depredadores y de quienes comercian ilegalmente con este orden de reptiles protegidos.

Seis de la mañana en Cambutal. Foto R. Puig

Soltando a las tortuguitas hacia su aventura. Foto R.Puig
Varios decenios después de nacer, las tortugas que sobrevivan en el océano, guiadas por un admirable instinto retornarán a depositar sus huevos exactamente en el lugar en que nacieron y de donde partieron para su larga y arriesgada aventura..

Dos o tres sobrevivirán para volver al sitio en donde nacieron. Foto R.Puig

Saben llegar al mar. Foto R.Puig
Durante un largo rato, mientras el sol se anuncia, contemplamos su marcha tenaz hacia las olas.

A ver quién llega antes. Foto R.Puig
Cuando las más veloces ya se han zambullido, otras aún andan rezagadas

Las rezagadas. Foto R.Puig
Las olas son el último obstáculo

Frente a las olas. Foto R.Puig
pero también ondas acogedoras

Superando el último obstáculo.. Foto R.Puig
Las que todavía no han llegado al agua siguen avanzando erre que erre…

Ninguna se rinde. Foto R.Puig
Si pudiesen hablarnos quizás podríamos escuchar alguna exclamación…

¡Por la tortuga que me parió! Foto R.Puig
Ya ha salido el sol, ¡es urgente entrar al mar! Las aves marinas no tardarán en llegar con sus voraces picos bien abiertos…

Ánimo, ánimo…. Foto R.Puig
Finalmente, con el sol por testigo,

El sol por testigo. Foto R.Puig
Alexis da por concluida esta última suelta de tortugas del 2018

Por hoy, misión cumplida. Foto R.Puig
.
Desde su fundación en el 2010 y ya a principios del 2014 los voluntarios de Tortuagro habían sembrado 36,977 huevos, de los cuales nacieron 35,587 tortugas. Gracias a ellos el número de «hueveros» había disminuido en un 90%.
Son los datos que he podido encontrar (Fuente: Tortuagro) correspondientes a febrero del 2014. Así que, transcurridos cuatro años más, la cifra al menos se ha debido de duplicar.

Aquí están los viveros. Foto R.Puig
Un día después de haber asistido a la suelta de las tortugas, había concluido el año 2018.
No estuvo nada mal acabarlo aprendiendo del trabajo de estos voluntarios, como testigos de su labor admirable.
Por la playa de Cambutal era hora de un baño temprano.
Otros preferían sacar los caballos a paseo.

Jinetes madrugadores.Foto R.Puig
.
Tras haber admirado la fabulosa tenacidad y alacridad de las tortugas recién nacidas…¿imaginan cuáles han sido mis propósitos para el 2019?
Con mis cordiales deseos de que ninguna ola les amedrante, ahí les dejo imaginando…
Gracias a tí y Alexis por toda esta información cientifica y romántica.
Gracias a ti Bernardo. Ha sido un descubrimiento fascinante, que le debo a Alexis y a su grupo de Tortuagro.
Gracias a tí y a Alexis por estas notas científicas y románticas!!!