¿Primavera en otoño?

Por un parque de Gotemburgo. Foto R.Puig
Me van a tener que disculpar que haya comenzado hoy con una foto de hace ya algunas semanas y con una pregunta lírica, pero es que había que hacerlo sin que, nada más enunciar un acontecimiento del viernes pasado, el asunto se considerase prosaico y el lector cerrase la página. No suelo ocuparme de los encuentros de alta política, pero es que la Cumbre social en favor del empleo justo y el crecimiento: reforzar la dimensión social de la UE se ha celebrado en el apacible barrio de Eriksberg por donde paseo a menudo.

El tranquilo barrio de Eriksberg. Foto R.Puig
Aquí, a poca distancia de estas casas, en una zona que fue polo de la industria naval sueca, los presidentes de las instituciones comunitarias, los Jefes de estado o de gobierno y los interlocutores sociales han debatido sobre la manera de fomentar a la vez el empleo justo y el crecimiento en nuestra Unión Europea.

Relieve de Ivana Machackova en el muelle de Eriksberg. Detalle. Foto R.Puig
Se suele decir que la Unión Europea no tuvo un enfoque social en sus orígenes, olvidando que ya desde el Tratado de Roma en 1957 empezó a funcionar el Fondo Social Europeo, y que una de las instituciones de la Unión es el Comité Económico y Social. ¿No es la libre circulación de trabajadores un logro social de primera magnitud?¿No han sido desde sus inicios los programas para la agricultura un sostén para las gentes de nuestros campos y pueblos?¿Qué decir, entre muchos otros ejemplos, de los Fondos de Cohesión o los de Desarrollo Regional?
Información no falta, sólo hay que dejar por un rato Facebook, Instagram o los juegos online y tomarse la molestia de leer. Las fuentes están disponibles con sencillos toques de teclado, cada vez más claras, como se suele decir, más user friendly. A pesar de todo, la prensa local -en la segunda ciudad de Suecia es monopolio de un solo diario- nos desayunaba ayer con su frecuente ración de ignorancia provinciana de todo lo que atañe a la Unión Europea. Es costumbre atribuirle todos nuestros males y no citarla cuando se habla de progresos; lo que, en medio de las crisis de nuestro tiempo, no es demasiado difícil, entre otras cosas porque en los últimos años de recortes y ajustes (de los que Suecia tampoco se ha salvado, sobre todo en materia de servicios de salud y educación) se han traducido en que ocho de cada diez europeos consideran que «la economía de libre mercado debe ir de la mano de un alto nivel de protección social» (Eurobarómetro de Setiembre-Octubre).
Así que volvamos a contar algo sobre lo que ha ocurrido en el Salón de Convenciones de Eriksberg, situado en instalaciones que fueron testigos del florecimiento de los astilleros de Gotemburgo a dos pasos del Science Park de Lindholmen, donde los estudiantes de la Universidad Politécnica de Chalmers pasan sin solución de continuidad de las aulas a las empresas de tecnología avanzada situadas en el mismo entorno. Pero sin embargo en Suecia es cada día más difícil cubrir los miles de plazas de maestro que se necesitan, por no decir de las imposibles listas de espera en hospitales y la crisis de la asistencia social cada día más apremiante.
La cumbre de Gotemburgo

El centro de convenciones de Eriksberg desde el muelle. Foto Quality Hotel
Aunque haya temas mixtos económico-sociales en los que sí se han podido adoptar directivas que tienen que ver con el mundo laboral y el mercado de trabajo, es sabido que el Tratado de la Unión Europea no otorga a sus instituciones el poder de legislar en materia social, terreno que se reservan celosamente los Estados Miembros. Pero en estos últimos tiempos, digamos que por que se le han visto las orejas al lobo, se ha sentido cada vez más que hace falta avanzar juntos en políticas sociales. Se va entendiendo que el progreso en común en este ámbito, aunque no sea del todo armonizable, requiere acciones e instrumentos comunes y aunar fuerzas para combatir el desempleo, en particular de los jóvenes y de las mujeres, y en definitiva afrontar el deterioro de las condiciones de vida y de trabajo de los europeos.
Los documentos del encuentro de Gotemburgo, organizado según tres áreas de trabajo que la Comisión y el Consejo han delineado como prioritarios, se puede consultar aquí:
- Acceso al mercado de trabajo (Access to the labour market)
- Condiciones justas de empleo y de trabajo (Fair employment and working conditions)
- La movilidad entre empleos: apoyo en las transiciones (In between jobs: supporting transition

Los participantes en la cumbre informal sobre el Pilar Social. Foto Sören Andersson
El resultado de este encuentro es que los Estados Miembros y los presidentes del Consejo, la Comisión y el Parlamento Europeos han suscrito los veinte principios de este Pilar Europeo de Derechos Sociales que la Comisión Europea lleva tiempo preparando en contacto con las instituciones comunitarias, los actores sociales y los gobiernos, y que en el próximo semestre será la guía para decidir políticas e instrumentos concretos y presupuestarios de aplicación que refuercen una Unión Económica y Monetaria más justa y profunda.
Digamos que la primavera que deseamos ha dado un paso en este otoño y que, como comenta Vidal-Folch, esto es menos que infinito, pero es más que cero y, en definitiva , una buena noticia en la buena dirección. Conociendo el percal, el comentarista concluye: «solo se ríen de estas cosas quienes no las necesitan. O los profetas nihilistas». Por mi parte me alegro de que estas cosas ocurran aquí, junto a la ría de Gotemburgo, un paraje y unos muelles que tantas caminatas de reflexión me han regalado durante años.
Pinchando aquí pueden leerse en castellano los veinte principios, cuya desarrollo en medidas y acciones concretas deseamos que sirvan a nuestra baqueteada Europa para consolidar y mejorar los derechos sociales de sus ciudadanos.
En lenguaje llano: hay tajo para rato.

Eriksberg. Foto R.Puig
Nota
El documento oficial que ha servido de base al suscrito en Gotemburgo puede descargarse aquí en la versión inglesa.
Para obtener sobresaliente se puede consultar aquí el vídeo de la conferencia de prensa final, con las intervenciones y respuestas de los presidentes del Consejo y la Comisión Europeos y del Primer Ministro sueco,
Tampoco podían faltar las imágenes de este Gotemburgo en evolución, que expone sus aspiraciones a una primavera para esta «ciudad abierta al mundo»
Por último, ya sabemos que al caballo se le puede poner delante el agua, pero si no quiere beber no bebe. Las fuentes de la información (cuya falta es ya un estribillo lamentar) para saber lo que significa la Unión Europea para sus ciudadanos están aquí a disposición de nuestros teclados, androides y tabletas. No es una serie de Netflix y hay que leer algo, pero hay para todos los niveles, hasta para los niños, pinchando aquí.
Además, si tenemos alguna pregunta particular y no hemos sabido encontrar respuesta, podemos formularla aquí.
Claro que, si nos da pereza escribir y todavía podemos hablar hay aquí el modo.
Muy importante!
Gracias Pancho.
La Unión Europea afronta desafíos nada fáciles, pero cuenta con los recursos y el potencial humano de gentes competentes y honestas que no escurren el bulto. Confiemos en que empujando, empujando, se logre que los Estados Miembros acepten más convergencias en política social, tan necesarias para una Europa más solidaria y más próspera, para todos sin exclusiones, en la que se reduzcan las desigualdades existentes. Creo que además es importante el servicio que Europa puede hacer a otras regiones del mundo con un modelo democrático equitativo y en paz.
adonde fui con Manolo Marí para aprender alemán. Bernardo.
El hablar alemán a mí se me quedó ya en el tintero. Creo, Bernardo, que tendré que dejarlo para mi siguiente reencarnación 🙂