Anatomía artística. En la Gipsoteca
La Gipsoteca
El museo calcográfico de esculturas de la Antigüedad griega y romana en la Universidad de La Sapienza de Roma es uno de los más completos del mundo. Acoge centenares de copias fieles, en escala real, en yeso, de ahí el nombre de Gipsoteca. Se accede desde uno de los dos grandes patios centrales.
Es además un acogedor lugar de estudio y de reunión, dotado con varias salas de lectura, donde los universitarios pueden preparar sus exámenes protegidos por gigantes mitológicos, y de instalaciones para seminarios y encuentros.
Embrujo surreal
Puestos a imaginar lugares en donde las estatuas parece que fueran a cobrar vida, yo diría que este es uno. Supongamos que nos quedamos encerrados una noche en este museo de yeso y que, a la manera de los juguetes de Toy Story, los gestos interrumpidos de estos seres recobrasen su curso, que bajasen de sus pedestales y continuasen con sus acciones.
Que el Hércules Farnesio se sacudiese su corona de halógenos y dirigiese una sesión de culturismo junto con los variados guerreros de los corredores y salas del museo
Que el despellejado Marsias se liberase del palo donde fue torturado por haber desafiado a Apolo y se aventurase, cicatrizadas sus heridas, en busca de otros faunos, para animar con su recuperada flauta la invitación a la danza que un congénere suyo protagoniza ante una dubitativa y sonriente doncella.
Que El gladiador Borghese recuperase su espada y su escudo y se precipitase a la búsqueda de su invisible adversario.
Que los Tiranicidas y el Arquero griego emprendiesen la batalla contra algún déspota
El Discóbolo de Mirón podría destruir no pocos vidrios de las ventanas de la Gipsoteca
Y desde luego sería hermoso ver el despertar de Ariadna y contemplarla, recuperada de su sopor y ensayando sus primeros pasos ondulantes
Irene sacaría a paseo al pequeño Plutón
Y las Afroditas se pondrían a buscar sus brazos.
El estudiante de anatomía artística en la Gipsoteca
Por el momento dejaremos este guión cinematográfico para explicar brevemente lo que hace un alumno de anatomía artística en este lugar, siguiendo las tareas del curso del profesor Marco Bussagli y la profesora Cinzia Nardini
Siguiendo el ejemplo de Séneca y después de sesuda reflexión, ya que el alumno no es tan estoico como el filósofo y teniendo en cuenta que hay estatuas que están en corrientes y otras que, en cambio, tienen cerca un radiador, elige dos de las más resguardadas del frío: el Gladiador Borghese (siglo II o I a.C., original en el Louvre)
Y la dama de Invitación a la danza (siglo II a.C.)
Los dibuja desde dos perspectivas distintas en una lámina de 50×70 cm.
Por el momento estoy en la fase de dibujar el frente de las dos figuras. Luego habrá que realizar una parte del cuerpo de las cuatro imágenes, pero decorticada, mostrando los músculos del sotto pelle, algo parecido a esto:
En el examen se presentan las ocho láminas y los bocetos preparatorios y se ha de demostrar el conocimiento de la denominación y posición de los músculos en cuestión.
Llegados a este punto creo que estaremos preparados para dar un experto masaje a todos esos personajes de leyenda en el caso de que revivan y necesiten desentumecerse. No obstante procuraré que el guarda del museo no me olvide dentro cuando antes del cierre a las 19:30 horas esté recogiendo mi caballete y mis trebejos de dibujo. Sin calefacción y en medio de tantos fantasmas puede ser una estancia nociva para la salud.