Horas de Madrid

La mañana del domingo me pilla en Madrid sin nada de importancia que contar, o casi nada…
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Ayer hemos deambulado mañana y tarde,
uno de esos días de otoño en los que se puede exclamar
¡ de Madrid al cielo !

Con la ayuda del Dr. Google, encuentro esta explicación de la famosa frase, que entre muchas posibles hoy les cito:
Madrid recibe a los conductores que acceden a la ciudad por la M-30 con uno de sus dichos más populares. Quienes pasan por debajo del puente peatonal que une el Parque de Roma con Moratalaz pueden leer que se dirigen «De Madrid al cielo». Es decir, que como en la capital no se está en ningún sitio.
El origen de esta repetidísima frase está algo difuso. Al parecer, pudo hacerse famosa a finales del siglo XVIII a raíz de las reformas que Carlos III realizó en la ciudad para embellecerla. Gracias a ellas Madrid dejó de ser la anticuada villa castellana y pasó a convertirse en la regia capital de un vasto imperio.
Existe otra teoría que afirma que en el Cerro Garabitas, en la Casa de Campo, se reunen todas las noches las almas de los difuntos madrileños y desde allí ascienden al cielo. Esta creencia la alimentan los vecinos del parque que aseguran que ven luces que ascienden por las copas de los árboles. Es probable que sean luciérnagas o fuego de San Telmo.
No obstante, la tesis más fiable relaciona el refrán con la obra del dramaturgo del Siglo de Oro, Luis Quiñones de Benavente, titulada «Baile del invierno y del verano». En ella hay unos versos que dicen:
«Pues el invierno y el verano,
en Madrid solo son buenos,
desde la cuna a Madrid,
y desde Madrid al Cielo».
Publicado en el diario ABC el 4 de octubre del 2014
En todo caso el aire y el cielo invitaban ayer a pasear y a comprar algo que no pese demasiado en la maleta…

Caminando calle abajo por la Ribera de Curtidores, si ustedes quieren curiosear sin fin pueden entrar en las Galerías Piquer y elegir de todo un poco, si es que buscan cosas viejas, lo que se suele llamar antigüedades y, con menor respeto, antiguallas.
…
¿Qué me llevo?

Si están cansados de pensar, hasta pueden sentarse en las escaleras y ver pasar…
…
Cuando cae la tarde

mejor es dejar el coche en casa

…
Es hora del teatro

de sentarse a tomar copas


Los pies ya están cansados

y se encienden los faroles

La noche fue joven
…
Este domingo vuelve a ser niño
Sorpresivo y simpático giro del sabio Moncho de los rincones y jardines de Gottemburgo y playas valencianas y catalanas a los espacios castellanos de la aséptica Madrid (chulona mía)!!!!!!! Y por hablar de recuerdos yo tengo grabadas en las páginas de mi austero corazón las calles hoscas y los hangares negros y obreros de la RENFE donde iba semanalmente a dar clases y sesiones de amistad, hermandad y libertad y de paso aprendí a soldar eléctricamente con lentes de astronauta latino.
Querido Bernardo, en realidad el epíteto de sabio, o sabia, se puede aplicar también a las ciudades. Aunque Madrid no sea tan antigua como Roma o como Atenas, disfruta de una sabiduría inconsútil que circula por sus calles. Basta con pararse a hablar con el portero de la casa donde me hospedo estos días para comprobarlo. ¿El secreto? ¡Que aquí nadie necesita sentirse forastero! Cristóbal, que llegó hace años del Ecuador, te lo podría confirmar. En cuanto a tus amigos de la RENFE, en estos días están ocupados en soldar una huelga…